En el mes de abril, otoño, se manifiestan cambios en la trufa y también en el florecimiento de otros hongos epigeos que cohabitan en la trufera.
El “engordamiento” acelerado de las trufas adultas se ralentiza y entran en una etapa de transición a la madurez que comienza con las bajas temperaturas, alcanzando las condiciones apropiadas a fines de mayo. No se puede dar fechas exactas, porque el proceso biológico de la trufa, dependerá no del calendario sino de las condiciones de clima principalmente. Las trufas llegan al final del otoño a su tamaño final y queda solamente su maduración.
En el mes de mayo los aromas comienzan a aparecer, aunque la maduración no es completa, y solo la experiencia del perro trufero y truficultor determinará cuando la intensidad del aroma de la trufa, logra su plena madurez para ser cosechada.
Paralelamente, otros hongos micorrícicos que crecen sobre la superficie, como la especie hebeloma, empiezan aparecer en otoño, los cuales se agregan a la escleroderma que se hace presente durante toda la temporada estival. Esta última especie, en el caso de la trufera de TerraTruf es el más abundante. Es necesario mencionar, que la experiencia propia permite sugerir que se haga una constante limpieza de estos hongos y eliminarlos lejos de la trufera.
