A los 10 años desde cuando nació la idea del Proyecto de Trufas en el fundo El Maitén, Coihueco, aparece la denominación que la identifica, TerraTruf.
TerraTruf, tierra de trufas: por un lado el suelo, su entorno, su ubicación y por otro lado, el fruto, el diamante negro resultado del esfuerzo del truficultor.
Ciertamente la tierra juega un rol preponderante en el cultivo de trufas, no es solo labrar el suelo, si no acondicionarlo y mantenerlo por muchos años para brindar un espacio de confort a la trufa y su árbol hospedero. Suena simple decirlo, pero su implementación se enfrenta a una serie de contradicciones, adaptaciones, juicios distintos, un mundo subterráneo y suprema paciencia. Y la trufa, el resultado, la joya gastronómica, que desprende su aroma para guiar a sus cazadores caninos y llegar a su encuentro bajo tierra. Luego, su aroma inigualable y presencia única, encantará a cocineros y comensales.
Tierra de Trufas, una apuesta para desafiar un mundo intrigante y aprender de él.