Zoocoria

Las trufas cuentan con un mecanismo extraordinariamente hábil para propagarse, toda vez que estando bajo tierra son incapaces de hacerlo. Es así que la dispersión de esporas para contaminar otros lugares o distribuir la contraparte sexual, lo hace a través de los animales (Zoocoria). Más interesante aún es este mecanismo, dado que ocurre solamente cuando las trufas están maduras (esporas fértiles) y generan su aroma característico que es apetitoso para los animales micófagos, atrayéndolos hacia ellas. Las trufas ingeridas pasan por el tracto digestivo y luego las esporas depositadas en el suelo junto a las heces. Los mamíferos son los más habituales, y entre ellos los lagomorfos, roedores, jabalíes y cerdos.

Esta forma de propagación es la manera corriente en las truferas silvestres (no existen en Chile).

Cuando el cultivo de trufas fue domesticado y las técnicas de cultivo se tornaron más eficaces, se recurrió a la misma estrategia de dispersión pero esta vez de la mano del hombre, la que es conocida actualmente como técnica de inoculación suplementaria o la mal llamada “reinoculación”.

Excavaciones de conejos bajo una encina española micorrizada con trufa negra en plena temporada de cosechas (TerraTruf)

TerraTruf